Muralista de compromiso social
Dr. Héctor Darío Aguirre Arvizu
23-01-06
#Semblanza, #Efemérides, #EfeméridesMexicanas, #UnDíaComoHoy 6 de enero de 1974 muere el
artista plástico mexicano, David Alfaro Siqueiros, conocido como El Coronelazo,
pilar de la renovación de la pintura mural con obras como La Marcha de la Humanidad
y La Nueva Democracia. Nace el 29 de diciembre de 1896.
Nació en Santa Rosalía de Camargo, Chih., el 29 de diciembre de 1896. Su nombre fue José de Jesús
Alfaro Siqueiro.
Se convirtió en un pintor reconocido principalmente por su obra mural en la que combinó técnica y compromiso social y político. Fue uno de los tres grandes muralistas mexicanos junto con Diego Rivera y José Clemente Orozco. Siempre preocupado por la dimensión pública del
arte, legó al pueblo de México su casa habitación, ahora conocida como la Sala
de Arte Público Siqueiros (SAPS); también entregó su taller de producción en Cuernavaca,
Mor. (La Tallera), además de una importante colección de obra de
caballete, gráfica, dibujo, estudios y proyectos murales, así como su
archivo personal y biblioteca.
Estudió en la
Escuela Nacional de Bellas Artes pero a los 16 años interrumpió sus estudios de arte con el fin de alistarce en el ejército de Venustiano
Carranza a las órdenes del general Diéguez. Debido a su actividad política estuvo varias veces preso. Realizó diversos viajes al extranjero donde se capacitó: Estados Unidos, Rusia, Argentina, Chile y otros lugares. También en ellos realizó actividad política.
En Barcelona, España, en 1921, publicó su Manifiesto para los artistas de América, documento en el que expone sus ideas sobre el muralismo, proclamando la supremacía del género
mural sobre la pintura de caballete, debido a que la primera era
pública y la segunda privada. Regresando a nuestro país organizó el Sindicato de Pintores, Escultores y Grabadores Revolucionarios. En esta etapa el gobierno le encargó varios murales, sin poder terminar el primero debido a una huelga estudiantil.
En 1922 participó en la elaboración, en la Escuela Nacional Preparatoria, de algunos murales.
En Estados Unidos estableció un taller experimental llegando a se su alumno Jackson Pollock, futuro representante del expresionismo abstracto.
En su creativa vida dejó plasmada su
ideología política en murales como La marcha de la humanidad, El llamado a la libertad, Entierro del obrero sacrificado y Muerte al invasor.
La Marcha de la Humanidad, en el Polyforum. |
En 1932 Los Angeles, California, realizó tres exposiciones y pintó tres murales: Mitin en la calle, Retrato actual de la Ciudad de México y América tropical, dos
de ellos experimentales y al aire libre. Procuró utilizar herramientas y
materiales modernos en consonancia con los tres llamamientos. El trabajo colectivo planteado lo complementó en el Manifiesto del Sindicato de Obreros Técnicos, Pintores y Escultores.
El llamado de la libertad, fragmento. |
En particular en su mural América tropical aplicó lo que después llamaría poliangularidad. La obra
presenta a un indígena mexicano atado en dos cruces con un águila
estadounidense sobre su cabeza y soldados revolucionarios apuntando al
ave. Por dicho tema causó polémica en su momento, debido a la ideología comunista que manifestaba. Esta obra fue restaurada
en 2012 por expertos del Instituto de Restauración Getty, se sitúa en la
calle Olvera, en el centro de Los Angeles.
En 1933 pintó, en el sótano de la quinta Los Granados, ubicada en Don Torcuato,
provincia de Buenos Aires, Argentina, el mural Ejercicio plástico, obra que ahora forma parte del Museo de
Bicentenario, ubicado en la antigua Aduana Taylor (hacia el lado Este de
la Casa Rosada), a la vista de todo público desde 2011, luego de estar
70 años en la oscuridad. Se considera que esta es la única pintura mural carente de sentido político-social, ya que fue un ejercicio experimental.
Entre 1941 y 1942 Siqueiros pintó en la ciudad de Chillán, Chile, el mural Muerte al invasor, el que quedó ubicado en la Biblioteca Pedro Aguirre Cerda, dentro de la Escuela México. En esta obra son presentados Cuauhtémoc, José María
Morelos, Miguel Hidalgo, Emiliano Zapata, Adelita de Zapata (que toma el
rostro de Angélica Arenal, esposa del autor); también los presidentes Lázaro
Cárdenas y Benito Juárez, así como los personajes chilenos: el toqui
Galvarino; Francisco Bilbao, el toqui Caupolicán, el joven Lautaro, Luis
Emilio Recabarren, Bernardo O’Higgins y José Manuel Balmaceda.
A mediados de abril de 1943, luego de
visitar las ciudades de Lima, Perú; Quito, Ecuador; Bogotá, Colombia, y
Panamá, donde expuso y difundió los contenidos del manifiesto En la guerra, arte de guerra, documento
en favor del Arte para la Victoria de las Democracia y una postura
antifascista entre los artistas.
Con apoyo de grupos de
intelectuales, universidades y organizaciones democráticas, llegó a La
Habana, Cuba, donde, patrocinado por el Ministerio de Defensa Nacional y
los centros culturales más importantes de la ciudad, imparte en
conferencias sus expresiones teóricas y técnicas.
En Cuba le solicita la familia
Carreño–Gómez Mena la autorización para elaborar un cuadro de caballete que
transformó después en un pequeño mural interior en el apartamento de la familia:
Alegoría de la igualdad y confraternidad de las razas blanca y negra en Cuba,
realizado en el apartamento del último piso de un edificio ubicado
entre las calles 22 y 13, en El Vedado, Cuba, inaugurada en octubre del
1943. La obra fue destruida tiempo después por los mismos Carreño Gómez–Mena.
También en 1943 pintó Dos cumbres de América o Dos montañas de América, en
el Centro Cultural Cubano-Americano de La Habana, resguardado
actualmente por la Colección Arte de Nuestra América Haydee Santamaría
en la capital cubana; y en el Hotel Biltmore Sevilla, lugar que fue su
domicilio, creó El nuevo día de las democracias o El día de la nueva democracia, perteneciente ahora al Museo Nacional Palacio de Bellas Artes de La Habana, considerado un antecedente del mural Nueva democracia que el artista pintó dos años después para el Palacio de las Bellas Artes en México.
El 29 de enero de 1969, Siqueiros decide
inaugurar la casa de Polanco como Sala de Arte Público, con la idea de
convertirlo en un centro para teorizar, innovar y enseñar los aspectos
más importantes de composición espacial, abierto al diálogo con las
generaciones del futuro. A partir de esta idea, en 1971 transformó el
espacio, habilitó el garaje y parte del jardín para pintar sobre sus
muros las obras Maternidad y Mural para una escuela del Estado de México.
Asimismo, intervino las paredes y techos de la sala-comedor con trazos de composición espacial para la obra mural La marcha de la humanidad, además de realizar montajes fotográficos y trazos dinámicos de algunos de sus murales en las habitaciones del primer piso.
En 1964 construyó una casa-taller en Cuernavaca, lugar donde fijó su residencia y donde inició la realización de su obra mural La marcha de la humanidad, ubicada actualmente en el Polyforum Cultural Siqueiros.
Durante sus últimos años realizó trabajo en la Sala de Arte Público Siqueiros en Polanco, Ciudad de México y en La Tallera, en Cuernavaca, Mor.
El 12 de diciembre de 1973, 25 días antes
de morir, Alfaro Siqueiros expresó su deseo de que en estos espacios se
preservaran y difundieran sus obras e ideas; que fueran centros de
análisis y experimentación para el arte público del porvenir, ahora
pertenecientes a la red de museos de la Secretaría de Cultura y el INBA.
Fue galardonado con el Premio Nacional de Arte de México (1966).
El apelativo de David fue usado por su pareja Graciela Amador Gachita en los años veite y desde entonces es conocido con ese nombre.
Fallece en
Cuernavaca el 6 de enero de 1974 y sus restos fueron sepultados en la
Rotonda de los Hombres Ilustres.
Legado
Entre 1974 y 1988, para administrar este
importante legado, se formó el Fideicomiso David Alfaro Siqueiros, que
fue dirigido por Angélica Arenal (1909-1989), viuda del pintor. Al
disolverse el fideicomiso, la Sala de Arte y La Tallera, junto con sus
colecciones de obra y acervos, se integraron al Instituto Nacional de
Bellas Artes, instancia encargada de custodiarlo.
Hoy en día la Sala de Arte Público
Siqueiros es un museo, un centro de consulta e investigación, pero
también es sede de innumerables conferencias y mesas de discusión sobre
arte. La SAPS ha abierto su espacio al arte contemporáneo para dar
continuidad a las inquietudes técnicas y temáticas del muralista.
El recinto ha tenido diversas
transformaciones a lo largo del tiempo, en los últimos años restauró los
murales que alberga y se digitalizaron más de 80 mil documentos y
materiales de su archivo. También se remodelaron sus instalaciones,
modernizaron la fachada, además de crear un mejor acceso y espacio para
una librería.
La Tallera define su vocación desde la
construcción intelectual que caracterizó la obra y el pensamiento del
muralista; es decir: la relación entre arte y política, el carácter
público del arte, la investigación y experimentación con materiales y
procesos novedosos, así como el legado educativo y de taller del museo.
Estos ejes han permitido al actual recinto establecer una conexión entre
la construcción de la modernidad mexicana y el arte contemporáneo
internacional.
El SAPS es definido como un museo vivo de arte moderno y contemporáneo que cuenta con la exposición permanente de los murales Trazos de composición subjetivos, Trazos de composición piramidal y la Sala poliangular,
de David Alfaro Siqueiros; así como exposiciones temporales, talleres,
conferencias, visitas guiadas, martes de cine y también es sede de otros
eventos culturales.
En armonía con el concepto original de
Alfaro Siqueiros de ser un espacio de producción, La Tallera es un lugar
de trabajo, creación e investigación en el que se organizan residencias
artísticas y talleres que involucran a la comunidad.
Con información de:
(1) Gobierno de México.
Imágenes tomadas de:
(1) Originalmente de Revista Central, pero la liga está caduca. El maestro.
(2) Wikipedia.
(3) Revista única.
D. R. 2023 Darío Aguirre
No hay comentarios:
Publicar un comentario