jueves, 2 de noviembre de 2023

Aquiles Serdán Alatriste

 Destacado revolucionario maderista

 
 
Dr. Héctor Darío Aguirre Arvizu
23-11-02
 
      #Semblanza #ElPersonajeDelDía #UnDíaComoHoy 2 de noviembre de 1876, nace en la ciudad de Puebla, Aquiles Serdán Alatriste, quien habrá de distinguirse como valiente precursor de la Revolución Mexicana. Siendo seguidor del Plan de San Luis, de don Francisco I. Madero, fallecerá el 18 de noviembre de 1910 combatiendo al gobierno de Porfirio Díaz. SEP. 
 

     Noviembre es un mes que abraza a una de las grandes figuras impulsoras de la Revolución Mexicana: Aquiles Serdán Alatriste, quien nació el 1 de noviembre de 1876 en Puebla de Zaragoza, capital del estado de Puebla, y fue asesinado el 19 del mismo mes de 1910, en el mismo lugar a los 34 años. Proveniente de familias poblanas de convicciones liberales muy arraigadas, creció, por un lado, bajo la gran influencia y educación de su abuelo materno el general Miguel Cástulo de Alatriste Castro, abogado liberal, profesor de Derecho en el Colegio de San Juan de Letrán, quien participó en la guerra de Reforma en el ala liberal, diputado del Congreso Constituyente de 1856 y Gobernador de Puebla. Su madre María del Carmen Alatriste Cuesta también puede considerarse prototipo de la mujer liberal de la época, educada, ávida lectora y de opinión aguda y actuar comprometido. Por el lado paterno, la influencia de Manuel Serdán Guanes, su padre, también fue determinante, férreo liberal con tendencias anarquistas, participó en las luchas contra la invasión francesa, como la batalla del 5 de mayo 1862, se convirtió en un destacado periodista y fue uno de los organizadores del Partido Socialista, fundador del periódico La Revolución Social y como abogado escribió un manifiesto al cual nombró Ley del Pueblo, -que se encuentra hoy desaparecido- [1] , considerado por algunos estudiosos antecedente de la Reforma Agraria, en el cual hacía un llamado al reparto de tierras, el fomento a la industria nacional, al salario justo para los trabajadores, la supresión del ejército y la educación obligatoria. Manuel Serdán, de convicciones liberales y sociales similares a las de la familia Alatriste, murió en 1880 y dejó a Aquiles, huérfano muy pronto, tenía tres años; su hermano Máximo nació póstumamente.

     Al morir su padre, este destacado revolucionario maderista y antirreeleccionista quedó bajo la protección de las mujeres de su casa, su madre y su hermana Carmen, quienes siempre le mostraron el camino de la resistencia, la lucha, la solidaridad. Fue el tercero de los cuatro hijos del matrimonio: Carmen, Natalia, Máximo y él. Al no poder continuar sus estudios básicos por falta de recursos, se dedicó al comercio del calzado en Puebla y Tlaxcala, lo cual le permitió conocer las condiciones laborales y de vida de los obreros del sector y contribuir a la economía familiar .[2]

     La familia Serdán Alatriste antes de ser opositora a la dictadura de Porfirio Díaz, por su tradición democrática y libertaria, ya cuestionaba la del entonces gobernador porfirista de Puebla José Mucio Martínez de la Fuente, de carácter despótico y gobierno autoritario, quien se mantuvo en el poder por dieciocho años (1892-1911). La primera incursión en la política de Aquiles fue precisamente contra la reelección de Mucio, lo cual le ocasionó también su primera detención. Otros hechos que influyeron en la participación revolucionaria de los Serdán, principalmente en Aquiles, fueron la lucha antirreeleccionista impulsada por los hermanos Flores Magón, las brutales represiones a las huelgas de las mineras de Cananea, en Sonora, en 1906, y la de las fábricas textiles de Río Blanco, en Veracruz, en 1907, y finalmente la publicación en 1908 del libro de Francisco I. Madero, “La Sucesión Presidencial”, que enarbolaba la bandera “Sufragio efectivo, no reelección”, detonadora del movimiento armado. En 1908 Aquiles se había afiliado al Partido Nacional Democrático, del cual se desilusionó rápidamente por las ambigüedades de Bernardo Reye, y lo abandonó, integrándose al Centro Antirreeleccionista de México; al conocer las ideas democráticas de Madero, a quien conoció en una visita a la Ciudad de México, inmediatamente las hizo suyas y mantuvo amistad y correspondencia con él, fue uno de los primeros que lo apoyo en sus planes.

     En 1909 formó el club político antirreeleccionista “Luz y Progreso” de Puebla [3], cuyos miembros eran en su mayoría obreros de las fábricas de hilados y tejidos simpatizantes anti porfiristas. Durante los siguientes meses no tardó en impulsar al movimiento antirreeleccionista en Puebla y Tlaxcala, organizando un amplio apoyo a la causa por parte de los obreros organizados y estudiantes, llegó a promover la creación hasta de 40 clubes antirreeleccionistas en todo el estado de Puebla [4]. Ese mismo año se afilió al Partido Nacional Antirreeleccionista. Incluso fundó el semanario La No Reelección.

     En mayo de 1919, durante la gira que Madero realizó a Puebla ya como candidato a la presidencia por el Partido Antirreeleccionista, Serdán consolidó su liderazgo en el movimiento. A pesar del boicot y las trabas impuestas por el gobierno del estado y de Porfirio Díaz, la visita de Madero fue todo un éxito. Carmen y Aquiles junto con otras 30 mil personas lo recibieron en la estación del ferrocarril. En esa visita Madero sumó a sectores reacios a su programa, al insistir que el cambio seria por la vía pacífica. Se considera que Puebla fue el punto álgido de la lucha antirreeleccionista, el mismo Madero afirmó que la manifestación que presenció fue la más entusiasta y vehemente del sentimiento nacional.

     Filomena del Valle y Abelleyra, mujer de espíritu libre y valentía, contrajo matrimonio con Aquiles Serdán el 6 de enero de 1908, tuvieron tres hijos: Aquiles, Héctor y Sara. Esta última nacería tres meses después del asesinato de su padre a manos de las fuerzas federales y la policía poblana, mientras su madre estaba bajo juicio y presa junto a su cuñada Carmen y su suegra.

     Aquiles Serdán es recordado por sus ideales de libertad y democracia, así como su lucha por un cambio en la sociedad mexicana. Desde que conoció a Madero, Aquiles Serdán hizo suya la causa antirreeleccionista y la lucha contra Porfirio Díaz, por lo cual fue perseguido e incluso aprehendido en la Ciudad de México durante las campañas. En abril de 1910 participó en las elecciones de la Convención Antirreeleccionista Nacional de los partidos aliados: "Nacional Antirreeleccionista" y "Nacionalista Democrático’’ como representante de distintos grupos poblanos, y como vocal dio su voto a Madero para presidente y a Francisco Vázquez Gómez como vicepresidente . [5]

     Los maderistas no ganaron, hubo fraude electoral; pese a las promesas de Díaz fueron traicionados y tuvieron que huir al ser encarcelado su candidato durante las votaciones. Cuando Madero se refugió en los Estados Unidos, afina el Plan de San Luis y planea el levantamiento armado para el 20 de noviembre, Aquiles lo alcanzó para recibir instrucciones, y su hermana Carmen llevó dinero para mantener el movimiento allá y en México. Madero encomendó a Aquiles una acción fundamental: iniciar el levantamiento en Puebla, la causa ya no era solo antirreeleccionista sino revolucionaria.

     Con esto en mente y con la ayuda de toda la familia, tan comprometida como él, Aquiles promovió el ideario maderista, estructuró y organizó a las bases poblanas de la revolución, quienes lo reconocieron como líder. Fueron vigilados, acosados y difamados, como muestra la carta del 26 de junio de 1910 de Aquiles al periodista Trinidad Sánchez Santos, quien lo había acusado de esconderse tras seudónimos, mostrándole que no tenía empacho en firmar los mensajes francos, ya que no era un cobarde .[6]

     El 17 de noviembre de 1910, el gobernador de Puebla fue informado de la proclama maderista para levantarse en armas contra Díaz el 20 de ese mes, sabedor de la lucha de la familia Serdán ordenó realizar al día siguiente, el 18, un cateo al lugar donde habitaba la familia: la casa que Natalia había heredado al morir su esposo, en la calle de Santa Clara [7], número 4 (hoy 6 oriente 206 en el Centro Histórico de la ciudad de Puebla). donde se sospechaba guardaban las armas para la revolución. Natalia Serdán, también participante activa en el movimiento, sabedora del continuo acoso que vivía la familia, los había acogido a todos en su casa. Siempre alerta y cautelosa, al igual que su hermana Carmen repartía propaganda, trasladaba armas escondidas bajo las faldas o en canastas de mercado, compraba pólvora en sacos supuestamente de harina para hacer pequeñas bombas caseras con las bolas de latón que adornaban las camas de su casa, aun cuando sabía que estaba bajo continua vigilancia de la policía secreta y varias veces fue cateado el domicilio. Una noche antes del cateo, Natalia al saber y considerar el grave peligro que corrían sus cinco hijos y sus sobrinos, los hijos de Aquiles, con el consenso familiar valientemente decidió salvaguardar sus vidas refugiándose en la casa cercana de su primo Miguel Rosales; fue una noche angustiante y dolorosa, pudo escuchar el ataque que sufrió su familia .[8]

     Con orden en mano, la policía llegó al inmueble con la intención de detener a los revolucionarios presentes. Los rebeldes no se acobardaron e iniciaron la defensa con carabinas y pistolones en mano, mientras la valiente Carmen incitaba a los vecinos a levantarse contra el opresor. La refriega duró hasta la mañana siguiente del día 19. Para salvar al líder, los revolucionarios le habían pedido que se guareciera en el sótano. Cuando los federales llegaron en ayuda de las fuerzas locales mataron a todos, una veintena de hombres. Vivas quedaron Doña Carmen la madre de los Serdán, su hija Carmen herida y Filomena, la esposa de Aquiles, con su embarazo a cuestas. Fueron encarceladas, luego procesadas. Cuando Aquiles intentó escapar, le vaciaron las armas encima. Su cuerpo y el de Máximo, su hermano, fueron expuestos en la prisión de la Merced, donde estaban las mujeres Serdán, con el fin de debilitar el temple de éstas ante la cobardía de las fuerzas porfiristas. No funcionó. Después, ambos cadáveres fueron, conforme a costumbre, exhibidos por dos días en la plaza principal de Puebla de Zaragoza. Tampoco sirvió: el 20 de noviembre, al día siguiente, la revolución estalló, el triunfo maderista fue total.

     Cuando Natalia regresó a su casa, encontró un panorama brutal y desolador: sus hermanos Aquiles y Máximo asesinados y su mamá, hermana y cuñada encarceladas, su casa destruida y saqueada. Sin embargo, con fortaleza y determinación recuperó los cuerpos de sus hermanos para darles sepultura. En mayo de 1911 logró la liberación de su familia, tras haber hipotecado su casa y ser embargada por el banco.

     Aquiles Serdán en un Manifiesto realizado en 1909 muestra claramente el papel fundamental que consideraba debería asumir la clase obrera, apelando a su patriotismo y a la reivindicación de su valor en la sociedad para la construcción de una patria más igualitaria ante la indiferencia de la clase dominante; sabe la importancia de la participación y lucha tenaz en la campaña electoral y alienta a la población a su defensa, considera que aún en caso de la derrota contribuirá a la regeneración política de la nación .[9]

     Puebla fue el sitio donde se inició el primer brote sangriento del movimiento revolucionario en México. Los hermanos Serdán, al igual que cientos de luchadores anónimos, prepararon el final de la dictadura porfirista y merecieron el reconocimiento pleno de la nación. El 11 de noviembre de 1932, por decreto presidencial de Abelardo L. Rodríguez, Aquiles Serdán fue nombrado Benemérito de la Patria y su nombre fue grabado con letras de oro en los muros de la Cámara de Diputados.

     A 111 años de su muerte, Aquiles Serdán Alatriste es recordado por su espíritu antirreeleccionista, sus ideales de libertad, justicia y democracia.

 
 
     Imagen tomada de:
     (1) 7 segundos.
 
     Con información de:
      (2) CHDH.
 
 
     D. R. 2023 Darío Aguirre
 
 
 
 

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