jueves, 23 de marzo de 2017

Luis Donaldo Colosio

El candidato que se quedó en el camino

Dr. Héctor Darío Aguirre Arvizu
17-03-23
#Efemérides, #EfeméridesMexicanas, #UnDíaComoHoy 23 de marzo de 1994 muere en un atentado en la colonia Lomas Taurinas, en Tijuana, Baja California, el candidato del  PRI a la Presidencia de la República, Luis Donaldo Colosio Murrieta.
Luis Donaldo Colosio
El asesinato político es moneda corriente en el sistema mexicano de gobierno. Lo vimos desde el asesinato sin sentido el 22 de febrero de 1913 de Francisco I. Madero y José María Pino Suárez, ya en ese momento renunciados a la presidencia y vicepresidencia del país, respectivamente.
Lo observamos en el asesinato de Álvaro Obregón el 17 de julio de 1928, entonces presidente electo, a manos de José de León Toral personaje perteneciente a grupos católicos contrarios a las políticas religiosas de Obregón. Previamente éste había sufrido dos atentados, uno en Estados Unidos y otro en el Bosque de Chapultepec, igualmente a manos de religiosos. En el último resultaron fusilados sin juicio el Padre Agustín Pro y su hermano Humberto, a manos de la policía.
Hay otros muchos casos de los que no hablaremos en este momento.
Sin embargo la muerte de Luis Donaldo Colosio marcó al país en tanto las condiciones políticas que prevalecían en esos años: el reciente levantamiento zapatista en enero de ese mismo año; el clima enrarecido debido a la postulación de Colosio y el desprecio de Manuel Camacho Solís al mismo por haber sido desplazado de “la grande”; la relación “fracturada” entre Camacho y Salinas de Gortari, entonces presidente; y la crisis económica en la que se encontraba el país pero las autoridades no anunciaban y que se destapó cuando en diciembre tomó posesión Zedillo, quien había sustituido a Colosio en la candidatura a la presidencia (recuérdese el llamado “error de diciembre”).
Colosio tenía dos meses y 13 días de haber iniciado su campaña, había sido diputado, senador, líder del PRI y en ese momento exsecretario de Sedesol.
El asesinato se dio en una zona de la Colonia Lomas Taurinas que era prácticamente un coso, un agujero del cuál difícilmente hubiera podido escapar incluso herido. El ruido que hacía la música con el tema “la culebra” difícilmente habría permitido el cuidado adecuado del candidato.
El candidato en Lomas Taurinas
Una línea de investigación fue dada gracias a un video que tomó un aficionado (véase al final). En el análisis de movimiento de los presentes se ve claramente, y así lo dio a conocer la autoridad investigadora en su momento, la participación de varias personas en la muerte del candidato:
“En el video obtenido por un aficionado, el fiscal Montes había observado que al terminar el mitin “varias personas impidieron con sus manos y sus cuerpos que la seguridad del candidato, el Estado Mayor Presidencial, controlara la situación”. De acuerdo con el fiscal, aquellos individuos habían rodeado a Colosio en formación “diamante”: un trabajo que sólo “profesionales conocedores de las aglomeraciones y con cierto acceso al entorno del candidato” habrían podido hacer.
Uno de los detenidos, el priista Rodolfo Riva Palacio, vinculado a la policía de Tijuana, había reclutado a los otros sospechosos en la delegación local del PRI. El video mostraba que Tranquilino Sánchez estorbaba los movimientos del general Domiro García Reyes, responsable de la seguridad de Colosio; revelaba que el ex judicial de Tijuana Vicente Mayoral se encargaba de abrir paso a un sujeto no identificado, que segundos antes de los disparos se había tirado al suelo “para hacer que Colosio se detuviera” (la policía lo bautizó como “El Clavadista”). El video mostraba, también, que un segundo desconocido, al que se llamó “El Lentes” se había agachado para que Aburto pudiera extender el brazo en el que llevaba la Taurus. Se podía apreciar, en fin, cómo el cuarto detenido, Rodolfo Mayoral Esquer, empujaba a otro de los encargados de la seguridad de Colosio, el coronel Federico Antonio Reynaldos del Pozo, con la evidente intención de obstaculizarlo.
No había duda: para el fiscal, se trataba de una “acción concertada”. ” (1)
El fiscal se desdijo de sus aseveraciones un año más tarde, argumentando que el perpetrador había sido un “asesino solitario”: Mario Aburto. Por cierto, apareció por lo menos otro  “Mario Aburto” que, como se pudo ver en fotos, no se parecían en nada.
Al menos dos Marios Aburto
La escena del crimen fue prontamente "maquillada", ya que se pavimentó, y arregló como si nunca hubiera pasado nada allí.
Cómo dejaron maquillado el sitio en "honor" del candidato fallecido
Después de 6 años de investigación el caso fue cerrado.



El video del momento del asesinato:

D. R. Darío Aguirre 2017






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